Hoja informativa del osteosarcoma canino
Tratamiento
El tratamiento del osteosarcoma en perros se centra tanto en los tumores primarios como en los secundarios.
Tratamiento: tumor primario
La terapia ideal implicaría la resección completa del tumor primario y, con mayor frecuencia, esto requiere amputación. Muchos perros se las arreglan extraordinariamente bien después de una amputación, pero es evidente que hay algunos pacientes para quienes esto sería inapropiado. Los problemas neurológicos concurrentes o la artritis severa constituyen razones para no considerar la amputación. La artritis moderada se puede tratar muy bien con la medicación adecuada y no tiene por qué ser una razón para no continuar con la amputación; obviamente, este es un tema que debe evaluarse caso por caso. La amputación tiene invariablemente un impacto tremendo en el estado de ánimo del paciente y, si bien es claramente una operación importante, estos pacientes parecen estar tan aliviados de estar libres del doloroso tumor que se recuperan extremadamente rápido.
En el caso de que la amputación se considere inapropiada existen otras opciones. Para los osteosarcomas del radio distal (esta es la extremidad anterior inferior justo por encima del equivalente de la articulación de la muñeca en los perros) se puede realizar una operación en la que se extrae el tumor y se reemplaza por un implante de titanio personalizado. Luego, la articulación de la muñeca debe fusionarse para que toda la construcción de hueso y metal se pueda estabilizar adecuadamente para que los perros sigan con sus rutinas diarias normales sin verse afectados.
El objetivo de este procedimiento es restaurar al perro a la normalidad movilidad en el menor tiempo posible. Si bien este enfoque tiene un atractivo definitivo, es fundamental enfatizar que el grado de control tumoral que ofrece este enfoque puede, en el mejor de los casos, ser equivalente a una amputación; También existe el riesgo de recaída del tumor en la extremidad en el sitio del tumor primario en algún momento en el futuro. Más importante aún, este procedimiento se asocia con un alto riesgo de complicaciones, el peor de los cuales es la infección asociada con los implantes metálicos.
Para los pacientes en los que la amputación y la llamada cirugía para conservar la extremidad no son apropiadas , la terapia paliativa se puede administrar en forma de radioterapia y quimioterapia. El protocolo de terapia paliativa estándar de oro implica la coadministración de radioterapia en tres de cuatro semanas consecutivas con quimioterapia junto con la primera y la última dosis.
Manejo quirúrgico de un tumor óseo mediante resección del primario tumor y reemplazo con implantes de varilla y placa de titanio