Nadar con mantarrayas en Hawái: 8 cosas que debe saber
Obtenga un excelente proveedor de tours
Como con la mayoría de los tours, elegir un proveedor bien revisado y recomendado es de suma importancia importancia. Un snorkel nocturno en mar abierto puede ser intimidante, y querrá asegurarse de estar con un equipo experimentado y conocedor que sepa dónde vienen las mantas a alimentarse y pueda explicarle fácilmente cada paso de la experiencia. Elegimos SeaQuest de Kona, y no nos decepcionaron. Se reunieron con nosotros en la bahía de Keauhou y nos explicaron cada paso del proceso que se desarrollaría esa noche.
Fueron pacientes, nos ayudaron a llegar a la balsa de observación y se cuidaron mucho de responder todas las preguntas que teníamos. También conocen bien a estos animales y estaban tan emocionados como nosotros al verlos emerger de las profundidades y dar vueltas debajo de nosotros. Nuestro equipo tenía chocolate caliente y galletas esperándonos después del esnórquel, ¡lo cual fue un beneficio muy apreciado!
Elija su equipo con cuidado
En el muelle, nuestro equipo de SeaQuest nos dio trajes de neopreno ya que el agua del océano por la noche puede ponerse un poco fría. Querrás asegurarte de que estén ajustados y no caídos para que no te pesen en el agua. Una vez a bordo de nuestro barco, nos ofrecieron equipo de snorkel estándar. Sin embargo, optamos por traer nuestras propias máscaras Tribord de rostro completo. No soy un gran fanático de respirar por la boca, ¡y estas máscaras marcan la diferencia! Se ajustan a toda la cara, lo que le brinda una mejor vista bajo el agua y le permite respirar normalmente. Pudimos relajarnos realmente con estas máscaras, lo que hizo que nuestra experiencia fuera mucho mejor.
Nadarás un poco
Cuando el sol se estaba poniendo, nuestro bote nos sacó más allá de la desembocadura de la bahía hasta un lugar donde se sabe que las mantas se alimentan de noche. Una vez allí, la tripulación desplegó una balsa equipada con un foco que iluminaba el agua. La luz atrae al plancton, que a las mantas les encanta comer. Luego tuvimos que nadar hasta la balsa a través de una ligera tajada del océano, unos 20 metros. Usamos fideos de piscina como dispositivos de flotación para nadar y para mantenernos a flote durante el esnórquel. Una vez en la balsa, se nos indicó que nos agarráramos a sus costados, que mantuviéramos la cara hacia abajo en el agua y que mantuviéramos nuestros cuerpos estirados detrás de nosotros. Luego miramos y esperamos mientras el plancton pululaba debajo.