¿Por qué se celebra el 5 de mayo en Estados Unidos?
La fiesta mexicana que más se festeja en los Estados Unidos es el 5 de mayo, pero no es ni el día de la Independencia de México (16 de septiembre) ni el de la Revolución Mexicana (20 de noviembre). Entonces, ¿por qué se festeja?
Comencemos con el hecho histórico. El 5 de mayo se conmemora la Batalla de Puebla, cuando en 1862 el ejército mexicano, al mando del general Ignacio Zaragoza y en quizás la acción militar más importante de Porfirio Díaz, derrotó al ejército francés en los Fuertes de Loreto y Guadalupe de la ciudad de Puebla, que se encuentra a unos 100 kilómetros al este de la capital mexicana.
Este hecho histórico tuvo impacto en los Estados Unidos, que en aquel entonces se encontraba enfrascado en la Guerra de Secesión, por lo que la Batalla del 5 de mayo detuvo temporalmente el avance de los franceses, quienes podrían haber seguido su paso hacia el norte al encontrarse con un país dividido.
Francia terminaría conquistando México en 1963, pero no avanzaron más al norte y tras el final de la Guerra de Secesión en 1965, Abraham Lincoln emitió una orden a Francia para retirarse de México con base a la Doctrina Monroe, de «América para los americanos», amenazando con atacar a los franceses si no respetaban este mandato. Estados Unidos además apoyó con provisiones al ejército mexicano del entonces presidente Benito Juárez, y eventualmente los mexicanos expulsaron a los franceses en 1967.
Ese año, en Texas, el estado donde había nacido Ignacio Zaragoza en 1829, los latinos comenzaron a festejar esta fecha en honor del conocido como «chinaco fronterizo».
Durante muchos años, el 5 de mayo se festejó de manera popular, pero en la década de 1930 se comenzaron a hacer los primeros festejos organizados, de la mano del consulado mexicano de Los Angeles, y con el paso del tiempo, el movimiento chicano adoptó el 5 de mayo como bandera ante la opresión.
Pero el 5 de mayo no se hizo tan popular por el hecho histórico, sino por la mercadotécnica de las de cervezas mexicanas, que en 1989 comenzaron campañas de televisión y medios impresos dirigidas a los latinos, pero que se fueron popularizando por todo Estados Unidos, a tal grado que Barack Obama y George W. Bush hacían recepciones en la Casa Blanca en este día.