Ronquera crónica
Laringoscopia rígida. Esto se puede hacer en el consultorio para niños mayores, pero los niños muy pequeños y otras personas que no pueden tolerar una laringoscopia flexible se someterán a esta prueba en un quirófano bajo anestesia general. El endoscopio rígido pasa por la boca para brindar la mejor vista de las cuerdas vocales. Se registran imágenes de las cuerdas vocales en reposo.
Estroboscopia laríngea. Para obtener una visión precisa de las cuerdas vocales en acción, los médicos pasan un endoscopio rígido o flexible conectado a una luz estroboscópica en la garganta. La luz estroboscópica parpadea en sincronía con la vibración de las cuerdas vocales mientras una persona habla. Esto hace que sea más fácil para los médicos determinar la frecuencia del movimiento. Debido a que las vibraciones individuales son demasiado rápidas para que las vea el ojo humano, la tecnología estroboscópica proyecta las vibraciones en cámara lenta.
¿Cómo se trata la ronquera crónica?
El tratamiento para la ronquera causada por los nódulos de las cuerdas vocales implica realizar cambios de comportamiento para que las cuerdas vocales puedan sanar. Los logopedas trabajan uno en- uno con niños y sus familias para promover buenos hábitos vocales, o lo que se llama «higiene vocal».
Un programa típico de higiene vocal implica:
- tratar cualquier condición médica (como GER) que agravan los problemas vocales
- Cambiando comportamientos que angustian las cuerdas vocales, como gritar
- aprender a respirar profundamente y relajar los músculos de la garganta
- tomarse el tiempo para hablar lenta y claramente
- mantenerse hidratado durante todo el día
- evitar las bebidas con cafeína, como los refrescos, que resecan las cuerdas vocales
Puede ser difícil para los niños con malos hábitos establecidos, como hablar en voz alta cuando están emocionados o aclararse la garganta cuando están nerviosos, hacer cambios. El primer paso es hacer que los niños sean conscientes del comportamiento y ver con qué frecuencia lo hacen.
Los niños mayores pueden aprender a realizar un seguimiento de la frecuencia con la que se involucran en el comportamiento (tal vez tomando notas en un diario), que muchos hacen sin darse cuenta. Luego, pueden practicar las habilidades que han aprendido en la terapia cuando están en casa, en la escuela y pasando tiempo con amigos.
¿Cómo pueden ayudar los padres?
Los padres pueden fomentar buenos hábitos vocales dando un buen ejemplo ellos mismos. Por ejemplo, en lugar de llamar a los niños desde otra habitación, camine hacia la otra habitación para hablar con ellos. Promueva momentos tranquilos (tal vez durante media hora cada día) y use una «voz interior» cuando estén en el interior .
Los sistemas de recompensas que fomentan estos nuevos comportamientos pueden ayudar a los niños en edad escolar a tener éxito. Ofrezca calcomanías, fichas, tiempo extra de televisión, una hora de acostarse más tarde o «premios» similares para que los niños se unan al nuevo , hábitos más saludables.